Cañafistol, provincia Peravia. Con el objetivo de contribuir a reducir los efectos de la enfermedad Escoba de Bruja en el cultivo de mango, el Centro para el Desarrollo Agropecuario y Forestal (CEDAF) y el Ministerio de Agricultura, capacitaron a técnicos y productores sobre su manejo efectivo.
Daniel Virgil, Encargado de la División de Entomología, del Departamento de Sanidad Vegetal, del Ministerio de Agricultura, indicó que para enfrentar los retos fitosanitarios, el país requiere que técnicos y productores estén empoderados en el tratamiento adecuado de las plagas para proteger cultivos esenciales como el mango, tanto en producción para el consumo nacional como de exportación.
En tanto que Feliciano Pinales, Encargado de la Unidad Protección Fitosanitaria, de la Dirección Regional Central, con asiento en Baní, explicó que la Escoba de Bruja es una enfermedad de importancia económica, ya que reduce considerablemente la producción en las plantaciones atacadas.
Arismendy Rodríguez, coordinador de capacitación del CEDAF, dijo que desde esa institución “se busca mejorar las capacidades para que los técnicos y productores de mango se sientan seguros y confiados en el manejo de la Escoba de Bruja”.
La capacitación se llevó a cabo en la finca de la productora Antarosa González, en la comunidad de Cañafistol, quien posee 75 tareas sembradas de mango de la variedad Mingolo, y fueron invitados 15 productores vecinos, cuyas parcelas también son afectadas por la enfermedad.
Pinales explicó que la Escoba de Bruja es producida por la combinación de un hongo y un ácaro, por lo que debe combatirse a través de un manejo integrado que incluye la implementación de buenas prácticas de cultivo combinadas con el uso adecuado de fungicidas y acaricidas.
Luis Ortiz, encargado de la Unidad de Desarrollo Rural (UDR), de la Regional Central, agradeció el apoyo del CEDAF para la realización del curso, y aseguró que “ahora el personal técnico de la Regional está mejor entrenado para enfrentar la Escoba de Bruja”, de la que dijo que está presente en gran parte de las fincas de la región.